También ha conocido a sus nuevos hermanastros
Annie Burriss, de 62 años, fue adoptada en 1945 pero su familia de acogida sólo le dijo la verdad 20 años después, cuando su madre adoptiva falleció. Desde entonces, empezó la búsqueda de sus padres biológicos.Por fin, el martes pudo ver por primera vez a su madre, Hilda Berry, en una comida organizada en un bar de Cheltenham, al oeste de Inglaterra. Sus siete hermanastros y hermanastras estaban también presentes, parte de su nueva enorme familia, puesto que Hilda Berry tiene 33 nietos, 54 bisnietos y siete tataranietos."Vino hacia mí y me dijo: 'Eres muy guapa y lo siento mucho'", contó Burriss. "Mamá sufre pérdidas de memoria pero cuando me vio, supo quién era inmediatamente. Me tomó la mano y después volvió a encerrarse en su mundo", agregó.
Annie Burriss, de 62 años, fue adoptada en 1945 pero su familia de acogida sólo le dijo la verdad 20 años después, cuando su madre adoptiva falleció. Desde entonces, empezó la búsqueda de sus padres biológicos.Por fin, el martes pudo ver por primera vez a su madre, Hilda Berry, en una comida organizada en un bar de Cheltenham, al oeste de Inglaterra. Sus siete hermanastros y hermanastras estaban también presentes, parte de su nueva enorme familia, puesto que Hilda Berry tiene 33 nietos, 54 bisnietos y siete tataranietos."Vino hacia mí y me dijo: 'Eres muy guapa y lo siento mucho'", contó Burriss. "Mamá sufre pérdidas de memoria pero cuando me vio, supo quién era inmediatamente. Me tomó la mano y después volvió a encerrarse en su mundo", agregó.
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